Se acercan las Fiestas Patrias, un largo feriado que invita a reunirse con familiares, amigos y vecinos a compartir comidas tradicionales, juegos típicos, música y bailes. Una celebración que entusiasma a los mayores, pero que también nos hace pensar: ¿qué pasa con la audición de los más pequeños?
Lo cierto es que si bien los adultos estamos acostumbrados a ciertos niveles de sonidos fuertes, desde el ruido de la calle a la música fuerte, pasando por la algarabía de las multitudes, para los más pequeños puede ser una situación complicada.
En este blog veremos cómo podemos ayudar a nuestros hijos e hijas a enfrentar esta experiencia y lograr que sea una ocasión divertida para todo el grupo.
Audición en bebés y niños pequeños
El oído de los bebés viene funcionando desde antes de nacer: se calcula que al menos 3 meses antes del parto ya escuchan la voz de su mamá, siendo capaces de reconocerla una vez nacidos.
El umbral de audición de un recién nacido es 40 o 50 decibelios mayor al de un adulto; esto significa que hay ciertos sonidos de baja intensidad que no van a escuchar, pero sí son muy sensibles a los sonidos altos, que pueden sobresaltarlos, asustarlos e incluso hacerlos dejar de respirar o comer por un instante.
Por lo mismo, lugares donde nuestros niños están expuestos a ruidos fuertes por mucho tiempo, como conciertos o fiestas populares, pueden poner en riesgo su salud auditiva. Te dejamos algunos consejos para protegerlos en estos entornos.
1.- Dales el ejemplo: Los niños aprenden mucho observando lo que hacemos, así que si ven que tú también cuidas tu audición, es más probable que lo hagan ellos mismos. Explícales de manera sencilla por qué es importante cuidar nuestros oídos.
2.- Haz pausas frecuentes: Si estás en un lugar ruidoso por un tiempo prolongado, como en un parque lleno de gente o unas fondas, intenta hacer pausas en lugares más tranquilos. Esto ayudará a que sus oídos se “relajen” un poco y evitará la sobreexposición al ruido.
3.- Mantente a distancia del ruido: Si no tienes otros medios a mano, trata de mantener a tus niños alejados de las fuentes de ruido más fuerte, como los altavoces o las zonas donde se concentran muchas personas. El solo hecho de caminar un poco más lejos puede hacer una gran diferencia en la cantidad de ruido que les llega.
4.- ¡Usa protectores auditivos!: Cuando sabes que vas a estar en un entorno ruidoso, como un concierto, un evento deportivo o incluso una fiesta, asegúrate de llevar protectores auditivos para tus peques. Hay versiones especialmente diseñadas para niños que son cómodas y no les molestarán.
En Crece Seguro contamos con protectores de oídos especialmente diseñados para bebés y niños pequeños, como es el caso del Protector Auditivo Mommy’s Helper, que puede ser usado entre los 3 y los 18 meses. Este además cumple con la norma ISO 4869-3, y ofrece en promedio una reducción del ruido de 28,6 dB.
También contamos con modelos para niños más grandes, para ser usados desde los 18 meses. Son ajustables incluso para adultos; livianos, prácticos y del tamaño ideal para llevarlos cuando sales con tu hijo o hija, o cuando estás de viaje. Además, están disponibles en varios colores.
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